Lejos de las novedades, en esta reseña nos dedicamos a un juego que data de 1996, Kill Doctor Lucky, en donde tenemos que tentar a la suerte, sortear al resto de los habitantes de la casa y matar con saña al Doctor Lucky... ¡pero sin dejar huella! ¿Teneis instinto para matar?
Componentes
Nuestra edición es la de 2006 editada por Titanic Games, que incluye también al perro y sus variantes, y que en general tiene componentes de muy buena calidad. Así, la caja, rectangular, es dura y tiene un tacto impermeable; Por dentro tiene un solo compartimento con cartones a los lados (tipo fantasy), y si hay que poner una pega, es el aire :( (el tamaño de la caja está adaptado al del tablero, y o se dobla más el tablero, o solo se podría haber reducido de altura). Por dentro, en los laterales, trae publicidad de otros juegos.
El motor principal del juego es el uso de cartas, de calidad aceptable y bonitas en su diseño (los tipos se explican en el apartado de la historia), aunque hay que añadirle una goma o una bolsita para que no se desperdiguen por la caja. Están en inglés, pero la dependencia del idioma es fácilmente solventable. Está muy bien que en las cartas de movimiento algunas habitaciones vengan con el dibujo/plano para poder localizarlas, cosa que no ocurre en algunas cartas de ataque, y hasta que te familiarizas con el tablero tienes que estar buscando por dónde andará la habitación en cuestión.
Por último, existen también unos pequeños tokens redondos que vas acumulando en cada intento de asesinato. Se llaman spite (rencor).
El reglamento, en inglés, no es largo y es fácil de seguir. Se trata de 4 caras de folio, estando la última dedicada a las variantes.
¿A que juego se parece?
Viendo el tablero en la mesa, es como si viajáramos en el tiempo... Las habitaciones, los personajes con sus armas caseras... es como retroceder hacia el Cluedo o a La herencia de tía Ágata... Quizá no deba extrañar, dado que el juego ya tiene sus añitos. Si recordáis el Cluedo, (encontrar al asesino, así como el lugar y el arma del crimen), no es difícil de imaginar que Kill Doctor Lucky sería un poco el escenario previo, el preludio: el asesinato puro y duro :) A nuestro modo de ver, es más divertido.
Mecanismos y otros comentarios:
CÓMO se JUEGA: Como viene siendo habitual, el desglose del funcionamiento del juego dejamos que nos lo cuenten a través de una historia... en este caso, uno de los visitantes de la mansión, quien se trae entre manos algo más que la típica cebolla o la sabrosa patata... pulsad aquí.
El setup es rápido y sencillo: separar y repartir las cartas, elegir personaje, y colocar al azar al Doctor Lucky sacando una carta de habitación. A partir de aquí, solo quedaría urdir bien nuestro plan...
La mecánica del juego, como hemos apuntado, se basa en las cartas: con ellas podrás mover o llevar a alguna habitación, bien a tu personaje o al Doctor Lucky, intentar asesinarlo (a sartenazos, por ejemplo), además de intentar boicotear los intentos de asesinato del resto. Todo esto, junto a la importancia de las líneas de visión en las habitaciones (no puedes repartir leña si te están observando) y a la rapidez con que se va moviendo el señor Doctor, hacen la estancia en la casa amena y caótica. Importante es que si entra en una habitación donde hay un personaje, le toca el turno a éste, lo que permite encadenar varios turnos seguidos. De hecho, uno de los principales factores de estrategia de este juego es precisamente, la colocación para intentar tener varios turnos seguidos y poder, por ejemplo, ir acumulando cartas.
También cabe señalar que mientras que el Doctor Lucky se mueve de una habitación a otra saltándose los pasillos, los personajes se ven obligados a cruzarlos y cuentan como un movimiento más, y además desde ellos se suele divisar bien otras habitaciones. Esto es un diseño bastante inteligente, que hace que el juego sea más interesante y evita que el Doctor persiga a un personaje indefinidamente y su turno sea perenne.
El análisis-parálisis, en general no tiene por qué ser alto, porque aunque exige cálculo para saber cómo encontrar al Doctor a solas o cómo hacer que entre en tu habitación, el juego puede cambiar rápido si lo mueven los demás. Da la sensación de rapidez, y cuando te quieres dar cuenta, tienes al Doctor a la otra punta de la casa. Además, ¡tampoco puedes calcular mucho sin saber que van a hacer los demás!
Quizá sea importante señalar que hay gente que lleva la cuenta (mental) del número de cartas de failure, pero este juego no es para pararse en ese tipo de cosas - ¡se trata de pasarlo bien y hacer un poco el burro!
En relación a la interacción, tiene y no tiene. Es imposible no sentir que tiene bastante al ver a todo el mundo alborotado por la casa, al tener que unirte (a veces de modo malicioso) para boicotear los intentos de asesinato de los demás (si eres el último en poner el resto empezará a pasar diciendo que no tiene cartas de fallo y si no quieres que un intento de asesinato de otro prospere y perder la partida, te tocará soltarlas a ti, al menos gran parte). Hay interacción al tener que estar atento de vigilar al resto para que no se queden a solas con la víctima... Vamos, que hay que estar con mil ojos además de intentar estar por encima del resto. Por otro lado, en el momento de la verdad, los planes los elaboras tú solo, porque de cooperativo... algo tiene, pero poco :)
Dificultad: Es un juego de reglas sencillas fácil de aprender, con un toque familiar. Ningún fríe-cerebros :)
Número de jugadores: Una de las cosas que tiene a favor este juego es el número de jugadores: 3-7. ¡Hasta 7 amigos pueden participar en el juego! Este alto número lo convierte en uno de los pocos de nuestra colección que podemos sacar cuando nos juntamos "demasiados" ;) Además, así como a 3 es un poco más pobre, con más jugadores se hace más divertido.
Variantes: El juego cuenta con muchas variantes; en nuestra edición vienen tres basadas en un perro que básicamente hacen más difícil el poder asesinar al odioso doctor, pues el canino también vigila. Existen otras ediciones donde se incluyen tableros extra para asesinar al doctor (la mansión victoriana de Craigdarroch, o el barco S.S. Afgang), así como juegos donde hay que salvar a Lucky (también con diferentes tableros).
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| El perro fiel |
Cuando os apetezca algo poco sesudo, sencillo, que acoja a un buen número de jugadores, y sin importarte el caos, Kill Doctor Lucky es una opción bastante simpática; sin embargo, tiene algo de enfrentamiento entre todos los jugadores que puede crear piques - así que hay que andar con un poco de cuidado. Es ameno, dinámico, y nos gusta la sensación de rapidez con que se va moviendo el doctor por la casa. No sabemos si a largo plazo acabará cansando, desde luego no es para sacar todos los días, pero de vez en cuando este toque de juego familiar y caos alegra cualquier tarde lúdica :) ¡Probadlo si tenéis ocasión!
Y si tienes un ratito... ¡rellena la encuesta sobre el juego para saber tu opinión!
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